Todos los expertos y académicos del área de gestión humana coinciden en que la inducción (onboarding) es uno de los procesos más importantes para la incorporación de un nuevo colaborador. Un proceso de inducción eficaz puede ayudar a los nuevos empleados a sentirse más cómodos y productivos en su nuevo rol, lo que puede conducir a un aumento de la satisfacción laboral, la retención y el rendimiento.
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El proceso de inducción se inscribe dentro de la planificación estratégica de una organización, ya que a través de esta acción, se busca garantizar que quienes recién se integran a la plantilla posean lo necesario para que su ingreso sea armonioso y efectivo, manteniendo los niveles de productividad, eficiencia, calidad, eficacia y sean capaces de aportar para la mejora del ecosistema en el menor tiempo, de ser necesario.
Se busca a través de estos mecanismos diagnosticar los niveles de conocimientos, habilidades y comportamientos de las personas que recién ingresan a la organización, y compartir todo aquello que sea significativo y útil para nivelarlas con el resto del equipo, para que, en un breve tiempo, tengan un desempeño óptimo, y su contratación se traduzca en mejora para las diferentes áreas de la organización. Es decir, el proceso de inducción determina el nivel inicial de los colaboradores y colaboradoras que ingresan a la plantilla y predestina diferentes actividades teórico-prácticas, que reduzcan la brecha y acerquen a las personas al nivel de desempeño de los equipos de trabajo.
Todo este proceso debe garantizar que las actividades cotidianas no se detengan, que el ingreso de personal nuevo no distraiga, retrase o interfiera en las tareas, actividades o proyectos de la organización. Por el contrario, se debe asegurar que los estándares de calidad se mantengan. La formación adecuada de los nuevos talentos debe aportar información y conocimientos sólidos que consoliden la eficiencia, lejos de repetir malas prácticas, se debe apuntar a la mejora continua, estimulando la excelencia dentro de la organización, en tanto esta sea un valor dentro de la cultura organizacional.
Un estudio realizado por la Society for Human Resource Management (SHRM) encontró que las empresas con procesos de inducción formales tienen una tasa de retención de empleados más alta que las empresas sin estos procesos. El estudio también encontró que los empleados que reciben una buena inducción son más propensos a estar satisfechos con su trabajo y a recomendar su empresa a otros.
La investigación realizada por Brandon Hall Group descubrió que las organizaciones con un sólido proceso de incorporación mejoran la retención de nuevos empleados en un 82% y la productividad en más del 70%.
Una mirada a las características de la inducción eficaz
Los procesos de inducción son programas que se realizan al inicio de una relación laboral con el fin de informar, orientar e integrar a los colaboradores que recién ingresan a la organización. En los programas de inducción se muestra ampliamente aspectos claves para el desarrollo óptimo y el despliegue del talento de acuerdo a cada cargo, dentro de la estructura organizacional. Algunas de sus características son:
- Los contenidos se organizan de forma secuencial y persiguen un objetivo general.
- Aunque es un proceso de inducción, también contempla la bienvenida a la organización y a los equipos de trabajo, tiene un carácter especial de amabilidad y empatía.
- En la inducción se debe incluir la filosofía de la empresa: misión, visión, valores, objetivos y en detalle la cultura de la organización.
- En la inducción se realiza una revisión de los recursos, normas, políticas, funciones del cargo y expectativas de los demás miembros del equipo y de la organización en general.
- En este proceso se facilitan, organizada y pedagógicamente, conocimientos y experiencias que ayudan al desempeño satisfactorio de las tareas y al logro de las metas, sin abrumar a las personas con el tiempo de aprendizaje o con la cantidad de información.
- La o las personas encargadas poseen dominio teórico y práctico de los aspectos a compartir con el personal que recibe la inducción, sirven de enlace y deben generar confianza, amabilidad y cercanía respetuosa.
La inducción es importante y beneficiosa
Aunque la inducción (onboarding) no es un proceso obligatorio, sí consideramos que es necesario, importante y estratégico, ya que transmite y sostiene la cultura corporativa, además de gestionar el conocimiento. Los debidos procesos de inducción eficaces y gestionados apropiadamente, hacen que los nuevos colaboradores se sientan más integrados a la empresa y ser parte de un equipo.
La inducción permite trasladar el estilo de trabajo, la forma como se hacen las cosas en la empresa de manera de preservar ese “saber hacer” hacia el nuevo ingreso. Esto puede ayudar a los nuevos empleados a aprender a hacer su trabajo de manera eficiente y efectiva, y también puede ayudar a evitar errores.
De acuerdo con un estudio realizado por la Society for Human Resource Management (SHRM), el 25% de la capacitación total que realizan las empresas se utiliza en procesos de inducción (onboarding). Este porcentaje puede variar según el tamaño de la empresa, la industria y la naturaleza del trabajo.
¡El online llegó para quedarse!
Los procesos de inducción en formato online son una excelente manera de dar la bienvenida a los nuevos empleados y ayudarlos a incorporarse a la empresa de manera rápida y eficiente. Estos procesos pueden incluir una variedad de actividades y contenidos, como presentaciones sobre la empresa, sus productos o servicios, su cultura organizacional, sus políticas y procedimientos, su estructura y sus beneficios.
Los procesos de inducción en formato online tienen una serie de ventajas sobre los procesos tradicionales en formato presencial. En primer lugar, son más flexibles, ya que los nuevos empleados pueden acceder al contenido a su propio ritmo y en cualquier momento que les convenga. Esto puede ser especialmente útil para los empleados que viven en diferentes zonas horarias o que tienen horarios ocupados. En segundo lugar, los procesos de inducción en formato online son más escalables, porque pueden ser utilizados por empresas de cualquier tamaño. En tercer lugar, los procesos de inducción en formato online son más económicos, ya que no requieren la contratación de un instructor o la reserva de un espacio físico.
Si está considerando implementar un proceso de inducción en formato online, hay una serie de cosas que debe tener en cuenta. En primer lugar, debe asegurarse de que el contenido sea de alta calidad y que sea relevante para las necesidades de su empresa y de sus empleados. En segundo lugar, debe asegurarse de que el proceso sea fácil de usar y que sea atractivo para los nuevos empleados. En tercer lugar, debe asegurarse de que el proceso sea medible, para que pueda ver los resultados de su inversión.
Los procesos de inducción en formato online pueden ser una excelente manera de mejorar el compromiso de los empleados y la retención de talento. Si está buscando una manera de dar la bienvenida a los nuevos empleados y ayudarlos a incorporarse a la empresa de manera rápida y eficiente, un proceso de inducción en formato online puede ser la solución adecuada para usted.
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